Valeria Almada es una artista plástica, terapeuta en varias técnicas, una mujer que abarca una serie de vivencias y busca mejorar la vida de sus cercanos con la práctica de ellas, trasmitiendo paz y energía.

Siempre fue artista y docente de pintura, pero además desde hace muchos años está volcada a la vida espiritual y holística, en una búsqueda personal que ha logrado trasmitir a muchas personas.

Desde siempre Valeria está unida a las clases de pintura, un arte que desarrolla en su local con variadas propuestas decorativas y clases en el Taller de Artes Plásticas.

“Hace 20 años que doy clases en Artes Plásticas y hay algo que veo en común tanto en la gente que llega como alumna como en quienes van a las clases en el taller de La Vida es Bella, llegan por la pintura y terminan encontrando mucho más que la pintura, terminan encontrando alguien que los escuche, a quien contar sus cosas, se crea un ambiente muy lindo, una energía muy linda en las clases, en los dos lugares y eso lo he ido ganando con el tiempo y con todo lo que he aprendido. A veces cuando te dicen presentate, quien sos, no hay mejor presentación que la que pueda dar otra persona, la familia, los amigos, los compañeros de trabajo, porque a veces a uno le juega el ego y yo no soy los títulos y diplomas que tengo colgados, no soy los talleres que he hecho, soy la que la gente entra a comprar algo y se queda una hora charlando, la que viene para pintar y distenderse y termina siendo mi amigo o amiga” dijo.

“Comencé a pintar en el año 1992, mi profesora Silvia me trajo a ese mundo de pinceles y pinturas, un mundo fascinante que me ha dado las gratificaciones más lindas, puedo trabajar de lo que amo y eso es lo mejor, no todas las personas pueden hacerlo” indicó.

La búsqueda

“Puedo sintetizar mi búsqueda, donde me encuentro hoy a raíz de una pérdida muy importante que tuve en el año 2010, fui incursionando, buscando algo que pudiera ayudarme a superar esa pérdida, ese dolor que había quedado en mi corazón y en mi alma, siempre tuve desde muy joven esa curiosidad por lo místico, lo holístico, todo lo que era hablar de la energía me atraía. Solo después de ese hecho que marcó mi vida pude con más ganas intentar buscar algo que pudiera llenarme, ayudarme a sanar” dijo.

“En el año 2016, que fue el primero del programa La Culpa no es del Chancho, escucho a María José Vera que hablaba de las terapias que ella traía a su casa, que la habían ayudado a ella y su familia, y las compartía con la gente que las precisaba. Ese mismo día le escribí y me puse en contacto con ella, agendé para tratarme y así comencé ese año a ir a una terapia de las que traía.

Traía tres terapeutas a su casa, una que hacía sanación cósmica, otra que hacía biodecodificación y otra que abría registros akáshicos. Comencé con sanación cósmica y encontré un mundo fascinante, fue la ayuda que precisaba para hacerme conciente de que solo yo podía salir de esa situación en la que me encontraba, la verdad que fue maravillosa la experiencia, me sanó, me ayudó y la recomiendo una y mil veces a quien lo requiera” agregó.

También probó otras técnicas que los terapeutas traían, continuando con la búsqueda de su bienestar personal y el aprendizaje de las mismas.

“Hice también biodecodificación que me ayudó muchísimo también, después un día la persona que daba Sanación Cósmica, Fernanda Saule, nos preguntó si queríamos aprender la técnica y nos sumamos, salió un grupito hermoso de allí, ella hasta cierta etapa de la técnica podía darla y posteriormente seguimos con Cristina di Martino que venía de Córdoba, una persona hermosa con una sabiduría hermosa, así seguí aprendiendo hasta que un día mirando en internet, veo algo que hablaba de un Taller de Angeles y Arcángeles, me llamó la atención, me inscribi y a partir de ahora hice el curso en Montevideo, se me abrió un mundo desconocido para mí pero que hasta el día de hoy es con lo que convivo cada día desde que abro hasta que cierro los ojos” dijo.

“Después de hacer cursos en Montevideo con la maestra Corina Higuini, que también la traigo a Durazno para que haga terapias, llegamos a tener grupos muy numerosos de participantes en las

técnicas, hicimos muchas iniciaciones con arcángeles, de limpieza energética, fueron transcurriendo los años y desde 2017 en adelante ella concurre periódicamente, hace consultas personalizadas en mi local de La Vida es Bella. Durante la pandemia paramos un poco por razones obvias y cuando retomamos empezamos con los Encuentros Crísticos, que son algo imposible de describir con palabras, hay que estar para sentir, para vivenciar. Corina es angeóloga, canalizadora, tiene muchas maestrías, pero principalmente es canalizadora y médium, las cosas que hemos podido vivenciar en esos talleres y encuentros ha sido impresionante” agregó.

El camino

En la búsqueda de las terapias que más le resonaban, Valeria incursionó en el mundo del reiki, una medicina tradicional china ancestral.

“Hice el curso de Reiki, el universo te va llevando a que encuentres tu camino. Un día en Artes Plásticas escuchando hablar a una alumna por teléfono escuché sobre reiki, me dijo que ella era maestra de Reiki, comencé a estudiarlo, a practicarlo, hice la maestría y he logrado con el tiempo hacer una mezcla entre el Reiki tradicional y los arcángeles, lo que hago es adicionarle todo lo que he aprendido y considero que hace bien. En mi espacio creé una terapia donde al reiki le agrego la simbología de los arcángeles, el péndulo, las piedras, hace unos cuantos años que tengo mi local donde vendo mis artesanías y cuadros, es mi lugar en el mundo, un lugar sagrado donde ocurre la magia de pintar, de crear, de ser” dijo.

“Creo que las manos son herramientas del corazón, trasmiten lo que uno tiene en el alma, La Vida es Bella es mi lugar sagrado, pude tener otro espacio donde hago reiki, tengo mi camilla, mi altar para los ángeles y arcángeles, donde siempre la mirada de Cristo y la Virgen María están en esos cuadros, el que viene a mi espacio holístico se encuentra con una terapia que consta de una meditación, una charla, le paso reiki, uso el péndulo, también hay otra devolución con otra charla, la gente que viene al espacio siempre se va agradecida, con paz, tranquilidad, que es lo que generalmente están buscando” agregó.

Círculo de Mujeres

Hace algunos años nacen los Círculos de Mujeres, una propuesta que busca unirlas y sentirse únicas, buscando su camino y la solución a sus problemas.

“En el 2021 tenía ganas de formar un grupo de mujeres, principalmente, nada es por azar, nada es por casualidad, voy a abrirme registros y una de las cosas que me dijeron es que tenía que formar un grupo de mujeres y fue una respuesta a lo que venía pensando. En octubre de ese año comenzamos el primer Círculo de Mujeres, donde sentimos una confianza absoluta, la que llega a ese círculo es proque está necesitando escuchar y ser escuchada, encontrar la herramienta para sanar su alma. Tenemos claro que cada síntoma o enfermedad que tenemos tiene una causa emocional, se trata de encontrar eso con ayuda, con terapia, con talleres, con distintas herramientas que nos han sido dadas y hemos aprendido con el tiempo, ayudar a la persona a encontrar eso es nuestro objetivo, para que se encuentre a ella misma y comenzar a sanar” agregó.

“Hay tantas herramientas que ahora están al alcance de la mano, internet es maravilloso cuando se usa bien, compartimos muchas cosas todos los días, canalizaciones, canciones, lecturas. Mes a mes tratamos de hacer un Círculo de Mujeres, donde todas son igual de importantes, no hay un fin, no hay un principio ni final, no hay nadie delante del otro, todas somos iguales y la única regla es el respeto mutuo, porque al respetar tus compañeras en ese círculo por lo que puedan contar o decir, eso es respetarte a vos misma” dijo.

“Allí tenemos un altar, llevamos flores, tenemos representados los cuatro elementos, el fuego a través de las velas, el aire a través de los sahumerios, la tierra a través de flores y plantas y el agua que siempre está presente en algún cuenco. Lo que hacemos son meditaciones, charlamos siempre muy lindo en primera instancia, la que quiera hablar lo hace, la que no quiere no lo hace, por lo general comienzo yo para dar un orden, luego hacemos meditación, cantamos mantras, canciones, danzamos, te aseguro que se sale con una energía tan en alto, una paz enorme, y sentís que no estás sola, que hay muchas personas que pasan por lo que vos pasás” contó.

Couching

Valeria sigue profundizando sus conocimientos y siempre volcándose hacia los demás.

“El año pasado hice un curso de couching holístico, me falta dar la última prueba para terminar el curso. Está muy bueno, porque es orientarte, acompañándote en el proceso de tu despertar. Fue como que se relacionó el curso que hice con el de los Círculos, porque lleva presente el acompañamiento para encontrar que terapia o que técnica es la que vos te resuena para que empieces a sanar. Para tener este certificado hay que estudiar mucho, porque es como que tenés que saber un poco de todas las técnicas que hay y que pueden ayudar a la persona, para que ella pueda encontrar lo que mejor se adapta a su situación, sea bioneuroemoción, biodecodificación, reiki, registros, hay tantas técnicas, programación neurolingüística, hay que saber algo de cada una para orientar a la persona de la mejor manera, acompañándola para que encuentre lo mejor” dijo.

OBA

La Organización de Bienestar Animal es también una de sus insignias siempre, dando bienestar y colaborando con la sociedad toda.

“OBA surgió en el año 2009, cuando un grupo de mujeres nos juntamos para ayudar a los perros de la calle, formamos la Organización, cuando hubo una creciente muy grande empezamos con un minirefugio que fue creciendo, fui presidenta de la organización muchos años, ha sido una tarea pesada y gratificante a la vez, porque no vemos una salida a la problemática de la superpoblación de perros, a pesar de todas las castraciones y jornadas que se hacen, los resultados no están a la vista. Falta tomar conciencia, empatía, eso a veces con los años va desgastando pero como que lo equilibrio un poco con todo ese camino espiritual que sigo por otro lado. Creo que no hubiese estado tantos años, soportado todo el estrés, los problemas económicos de OBA y la tensión que lleva esta problemática, si no hubiese tenido apoyos emocionales” dijo.

“Todo lo que he transitado y hecho estos años me ha posicionado donde estoy, se que me queda mucho para aprender pero lo poco que he aprendido hasta ahora me permite seguir divulgando esto tan hermoso, seguir apoyando y conteniendo, creo que la gente busca cada vez más estos caminos y herramientas, el abrazo último de los Círculos de Mujeres como los Encuentros Crísticos, es sentir que las almas se tocan, es fundirse en una sola en total agradecimiento y hoy no tengo más que agradecimiento a la vida, a la familia, a los amigos, al trabajo, a esa tarea titánica que llevamos adelante con las compañeras de OBA, día a día cuando me levanto es agradecer, al igual que cuando me acuesto” agregó.

“El día de los enamorados escribí algo y siento que a esta altura de mi vida estoy enamorada de la vida, me gusta el lugar donde estoy, el lugar que ocupo, me gusta quien soy, ver esa devolución de la sonrisa en el otro cuando habla conmigo, o la lágrima cuando se abre hacia mi, cuando me cuenta sus problemas y se va con una sonrisa, eso es la satisfacción mas grande, una gratificación maravillosa” finalizó diciendo.