«Este en un momento de reencuentro del fútbol duraznense, de estar junto a esta enorme y querida persona». «Mi ídolo no es Luis Suárez, ni Edinson Cavani; mi ídolo es Antonio Alzamendi Casas «.
«Lo cotidiano de la vida no pasa por “ser Campeón» y menos aún ser «Campeón del Mundo”; pero él lo fué y pareciera -por su natural forma de ser humilde y sencilla- que jamás haya saboreado esa instancia y menos aún siendo el principal protagonista de lo que hasta este momento es, la máxima consagración de River Plate argentino en toda su historia;obteniendo en 1986 con su gol la Copa del Mundo a nivel de clubes.
En cada ocasión, tras cada conquista, la palabra “Durazno” emergía espontáneamente de sus labios
Antonio “hormiga” Alzamendi, nunca olvidó sus raíces, aún desde el mal alto pedestal.
Finalizada su gran carrera profesional, reafirmando su amor por el departamento, intentó lo que había jurado el día que dejó la ciudad para iniciar el derrotero en el fútbol profesional: ser Campeón del Interior con la Selección de Durazno. Lo intentó; el objetivo estuvo cerca, llegando a la final en 1992 cayendo ante Ligas Federadas. En diciembre de 2011 fue nominado “Deportista del Siglo XX”, la más alta distinción jamás otorgada a nivel departamental. lo que condice con el respeto y admiración que su vida y trayectoria recogen a nivel mundial Nombrar “Alzamendi”, es decir “Durazno”, en cualquier parte del país y en cualquier parte del Orbe. El apellido pone al departamento en la misma igualdad, en Uruguay y en el Mundo; surge de manera espontánea al pronunciarse; la palabra Durazno.
Tal como si se nombrara al río Yi, la avenida Aldama y Churchill, el puente “viejo”, el camping, el festival de folklore; la casaca Color Pitanga o la Roja del Yi. Alzamendi es sinónimo irrefutable de Durazno; de sus lugares y de su gente, es parte indisoluble de Durazno, en sus más de 200 años de fundación.
En cada ocasión, tras cada conquista, la palabra “Durazno” emergía espontáneamente de sus labios
Antonio “hormiga” Alzamendi, nunca olvidó sus raíces, aún desde el mal alto pedestal.
Finalizada su gran carrera profesional, reafirmando su amor por el departamento, intentó lo que había jurado el día que dejó la ciudad para iniciar el derrotero en el fútbol profesional: ser Campeón del Interior con la Selección de Durazno. Lo intentó; el objetivo estuvo cerca, llegando a la final en 1992 cayendo ante Ligas Federadas. En diciembre de 2011 fue nominado “Deportista del Siglo XX”, la más alta distinción jamás otorgada a nivel departamental. lo que condice con el respeto y admiración que su vida y trayectoria recogen a nivel mundial Nombrar “Alzamendi”, es decir “Durazno”, en cualquier parte del país y en cualquier parte del Orbe. El apellido pone al departamento en la misma igualdad, en Uruguay y en el Mundo; surge de manera espontánea al pronunciarse; la palabra Durazno.
Tal como si se nombrara al río Yi, la avenida Aldama y Churchill, el puente “viejo”, el camping, el festival de folklore; la casaca Color Pitanga o la Roja del Yi. Alzamendi es sinónimo irrefutable de Durazno; de sus lugares y de su gente, es parte indisoluble de Durazno, en sus más de 200 años de fundación.
Gracias por tu aporte y por tu Amistad «.
Victor Darwin Rodríguez, 18 de Noviembre 2024