Hamburguesas por los valientes

La edil Virginia Viñoly se refirió al evento que está apoyando el Club de Leones, buscando dar apoyo a la Fundación Pérez Scremini, con motivo de ampliar la atención a adolescentes. 

“Me voy a referir a un tema de suma importancia que comprende a todo el país. Próximamente se llevará a cabo una actividad en la ciudad de Durazno en apoyo a la Fundación Pérez Scremini filial Durazno, con el apoyo del Club de Leones la fundación ha extendido la atención a adolescentes, por lo tanto necesita ampliar y mantener sus instalaciones. El evento se denomina “Hamburguesa por los valientes” una noble causa, apoyar que se estará cumpliendo el viernes 9 de agosto próximo en la sede Club de Leones Durazno, ubicado en Eusebio Piriz 682, entre Arrospide y Morquio” dijo la edil. 

“El objetivo es llegar a 10.000 hamburguesas en todo el país, con el objetivo de generar esas mejoras en la institución. Pido que mis palabras lleguen a todos y sean solidarios con esta causa” finalizó. 

La Fundación Pérez Scremini trabaja desde hace años con chicos con cáncer, de 0 a 14 años, desde 2020 amplió la cobertura y hoy también llega a adolescentes de hasta 18 años. Entre 120 y 130 niños se suman cada año a los más de dos mil que atiende la institución. La atención que reciben es integral: abarca desde el tratamiento médico a un apoyo psicosocial durante después de la enfermedad. Los chicos que se atienden en la Fundación Pérez Scremini ingresan a través de ASSE. La mitad de ellos viene desde el interior del país. Al llegar al lugar acceden de manera gratuita al tratamiento específico y también a un cuidado integral. Hay un equipo de psicólogos, psiquiatras, asistentes sociales y psicopedagogos que conoce las realidades de todas las familias. Más allá de tratamientos, está toda la parte de poder contener a esas familias desde las necesidades que puedan tener. Un niño que es dado de alta, por ejemplo, necesita volver a su casa y que haya una higiene mínima, debe tener su baño y ciertas necesidades básicas que muchas veces no tiene. El equipo hace un relevamiento de las necesidades y la sociedad siempre colabora. 

La institución estima que unos cuarenta y cinco adolescentes se sumen cada año con la ampliación de la cobertura. Los jóvenes son derivados a la fundación porque el cáncer de adolescentes es mucho más parecido al cáncer de niños que al de adultos. Para poder recibir a estos adolescentes, la Fundación está en obras, se llevan adelante trabajos de ampliación de unos 1.500 metros cuadrados del centro de atención, donde se construirán salas de medicamentos, oficinas, espacios para los padres y laboratorios. 

El cáncer infantil es la primera causa de muerte en niños, tanto en Uruguay como a nivel mundial. De todas formas, ocho de cada diez chicos con cáncer tratados en la fundación se curan. 

La incorporación de nuevas tecnologías permite diagnósticos más precisos y en sus laboratorios se procesa el 100% de las muestras de sangre y médula de la totalidad de los diagnósticos del país. La Pérez Scremini atiende todo tipo de cáncer y enfermedades en la sangre, donde la más común en los niños es la leucemia. De hecho, corresponde a 1 de cada 3 casos. La atención es hasta los 18 años, pero hay excepciones de jóvenes de 19 y 20 años que, por el tipo de tratamiento, requieren un protocolo de atención pediátrica. 

La fundación se nutre de recursos provenientes de un convenio con ASSE, que da una partida mensual y nos permite financiar el 40% del presupuesto operativo. El resto, hay que conseguirlo. Y para funcionar, se necesitan entre 2 y 3 millones de dólares que donan particulares, empresas o se obtienen por eventos. Los pacientes reciben sus tratamientos en el Hospital Pereira Rosell y los familiares pernoctan en las instalaciones del Hogar ‘Doña Coca’, una donación de la familia Troche. 

La tasa de sobrevida en Uruguay es del 80% y es el mayor índice de Latinoamérica. La fundación crece en el país y ahora han habilitado  las obras de ampliación del hospital de día con un área de internación para recibir adolescentes, en una inversión de casi 500.000 dólares. Las embajadas de voluntarios se encuentran en 24 localidades del país y el objetivo es el acompañamiento social de los niños y adolescentes y sus familias.