Alejandra Tarigo Peluffo vive la música desde niña, perfeccionándose y formándose para desarrollar un arte que comparte con sus estudiantes, la familia y todos quienes quieran acercarse.
“Siempre digo que la música es algo innato en mí, nací con la música, nací en una familia de músicos y sin duda mi vida vino direccionada hacia eso. La música es mi pasión si bien es mi profesión a la cual elegí, para la cual me preparé y la cual vivo día a día con mucho entusiasmo” contó presentándose.
“Pero la música vino predeterminada a dedicarme a esto, mi abuelo es músico, por la rama de mi mamá también hay músicos, algunos familiares, mi padre es reconocido sobre todo como docente y director coral, me guió desde muy chica. El camino lo quise emprender estudiando diferentes cuestiones que tenían que ver con la música, empecé a los seis años a estudiar solfeo en el Conservatorio, piano y flauta dulce, luego el Conservatorio cerró y continué en el Instituto Schumann donde me recibí de profesora de solfeo y profesora de piano. Mi carrera continuó ingresando al IPA, estudiando, en el año 2001 presentándome por Durazno para un llamado y fui seleccionada para concurrir todas las semanas durante cuatro años al Taller de Formador de Formadores que pertenecía al Ministerio de Educación y Cultura, cuatro años de los cuales salí titulada como Directora de Coros especializada en Armonía y Contrapunto, en Técnicas Vocales” agregó.
A lo largo de su vida, la música siempre ha estado presente y son muchas las actividades que ha desarrollado.
“Formé parte del Coro Departamental de Durazno cuando lo dirigía mi papá Roberto Tarigo, viajé muchos años a Paso de los Toros donde fui directora del coro de esa ciudad, he recorrido un montón de lugares gracias a la música y estoy agradecida a este arte maravilloso que la vida me dio la oportunidad de nacer en un lugar donde se me sembró la semillita, que me la hizo ir germinando y que año a año trato de ir autoregando con conocimientos nuevos y con muchas ganas de siempre continuar desarrollándome” contó.
“Trabajo en Educación Primaria, en Educación Secundaria, he sido directora de coros de diferentes edades y actualmente me dedico a los coros de niños específicamente. Soy docente de la Cátedra de Canto del Conservatorio Departamental, hace ya diez años, he concursado en Primaria obteniendo el cargo de efectividad que actualmente desempeño y también he estudiado el Diplomado en Gestión Cultural y actualmente estoy cursando una Maestría Internacional en Musicoterapia” dijo.
La familia es el pilar fundamental para Alejandra, que considera el tiempo compartido con ella, el mejor de la vida.
“Mi familia está formada por mi papá y mi mamá, que son mis pilares, una hermana que adoro, un sobrino, mi cuñado al cual considero un hermano y una hija maravillosa que me dio la vida y con la cual compartimos el maravilloso mundo del arte, además de que ella tiene otros gustos, pero también compartimos música. Como hobby realmente, siempre digo que vivo de lo que me gusta, por lo tanto considero que permanentemente estoy haciendo también es un hobby, lo que la gente muchas veces toma como terapia, la música, los beneficios que tiene, estoy inmersa en esa terapia y para mí ese es el hobby. Pero si tengo que elegir algo, elijo estar en familia, estar en casa y con mis seres queridos es lo máximo que me gusta hacer. No soy de salir, pero si me gusta compartir mucho en familia” contó.
El martes próximo tendrá lugar una de las actividades programada desde su Cátedra de Canto, llamada enCanto, con el objetivo de convocar a otros coros y también al público, a participar de la experiencia.
“Este año me propuse desde la Cátedra de Canto del Conservatorio realizar una actividad que fuera bastante sacada, por así decirlo, de las cuatro paredes donde uno diariamente da sus clases. Una actividad que se llamara enCanto y que tuviera cada mes un ciclo, la llamo participativa, educativa y demostrativa. Educativa porque hablo un poco sobre lo que es la voz y el funcionamiento, para que la gente que concurre pueda conocer un poquito más de lo que cada uno tenemos, a veces hablamos, respiramos, mecánicamente, pero está bueno tomar conciencia de eso tan importante que es el don de poder respirar y emitir sonidos, ya sea para hablar, para cantar, pero tomar conciencia de eso” dijo.
“También es demostrativa porque participan estudiantes de la Cátedra de Canto e invitados especiales y participativa porque quise hacer un ciclo donde el público puede ir a apreciar lo que se está dando en el momento, también puede ser parte del ciclo. Me gusta que la gente también cante junto a nosotros, se saque esas vergüenza que el ser humano generalmente tiene porque se dice que la voz desnuda el alma, entonces también que el público participe es bueno” agregó.
“Este mes cumplimos la cuarta etapa del ciclo, comenzamos en abril, estrenando en el salón de eventos del Espacio Cultural, luego en la Biblioteca de Cobusu pensando en descentralizar y recorrer los barrios, en junio fue en el hall del Museo Casa de Rivera homenajeando a los abuelos e invitando a talleres de canto de la tercera edad para poder compartir con ellos esto tan lindo que es la música y ahora en julio será en el hall del Centro Cultural Teatro Español el martes a las 19 horas, donde como invitado especial estará el coro del Colegio San Luis que lo dirijo también, estudiantes de la Cátedra de Canto y el Taller de Canto de Niños, haciendo un cierre cantando todos juntos con el público presente” indicó.
La música ha sido vida para Alejandra, pero también una estrategia para volcar el arte.
“En cuanto a la reflexión sobre la música, no lo digo solo yo, la música sana, la música cura, te permite expresar, transmite emociones, te hace reír, te hace llorar, te hace viajar mentalmente hacia lugares remotos que muchas veces sería imposible llegar, pero sobre todo une, logra que las personas puedan unirse, no necesariamente tienen que dedicarse a esto, pero la música tiene ese don que es el de unir, creo que es fundamental sobre todo en el mundo de hoy, un mundo tan loco, tan apurado, tan tecnológico, está bueno que la música sea tomada como un punto que en determinado momento nos tenga en un mismo lugar a todos juntos, disfrutando de algo, de un canto, de un ejercicio de respiración y relax que son necesarios para la preparación del cantar, compartir un momento con los demás, pero que ese momento el fin sea hacer música y en este caso en lo que a mi me atañe que es el cantar” dijo.
“La música tiene que estar presente, ha estado presente desde los comienzos mismos del hombre, lo ha acompañado en su evolución así que sin lugar a dudas eso es lo que demuestra que la música es algo que no debe faltar en la vida de nadie, no solo para el ser humano sino para los seres vivos, porque se ha demostrado que es benéfica para las plantas, para los animales” finalizó.
