Se realizó el segundo encuentro del ciclo de charlas y muestras “Mujeres en el Espacio”. En esta instancia, la homenajeada fue Lágrima Ríos y se solicitó la nominación de un asteroide en su honor.
Durante el evento, se presentó la cuerda de tambores del Taller de Candombe del liceo N.° 48 Bernardo Prudencio Berro. Los asistentes también disfrutaron las muestras artísticas realizadas por los estudiantes que integran el Coro, el Taller de Danza y el Taller de Instrumentos Musicales del liceo N.° 29 Alicia Goyena.
Los estudiantes del liceo N.° 3 Dámaso Antonio Larrañaga presentaron la investigación científica que elaboraron. Además, se realizó la solicitud de nominación del asteroide en honor a Lágrima Ríos a través de uno de los observatorios institucionales.
Este evento celebró las contribuciones de Lágrima Ríos a la cultura nacional, al tiempo que mostró el talento y la dedicación de los estudiantes de Secundaria involucrados en este significativo proyecto.
El ciclo Mujeres en el Espacio tiene como objetivo visibilizar los aportes que destacadas mujeres uruguayas han realizado a la cultura nacional y a la ciencia. Asimismo se busca resaltar el valor educativo del trabajo multi e interdisciplinario entre ciencia y arte. Estos encuentros son organizados por la Inspección General Docente en coordinación con las inspecciones de asignatura de la Dirección General de Educación Secundaria (DGES) desde el año 2023.
A nivel departamental, la Intendencia de Durazno y el Instituto Nacional de Música (INMUS) celebrarán a nivel nacional en la ciudad de Durazno, el centésimo aniversario del nacimiento de Lágrima Ríos, que se cumple el próximo 26 de setiembre. En la oportunidad se realizarán varias actividades culturales, entre otras una exposición alusiva a su figura.
Con este motivo se invita a artistas plásticos, dibujantes, pintores, caricaturistas, escultores, fotógrafos y otros, a participar con sus obras (una por cada creador), ya sean nuevas o viejas realizaciones, referente a la artista que será homenajeada, conocida como la «Perla negra del Tango», o la «Dama del Candombe».
También pueden participar escritores y poetas con pequeños textos y poemas sobre Lágrima Ríos, que se podrán exponer junto a las obras plásticas. Quienes deseen participar o por mayor información, se pueden comunicar a los celulares 091 866 444 o 098 930 880.
Lida Melba Benavídez Tabárez nació en Durazno el 26 de septiembre de 1924 y falleció en Montevideo, 25 de diciembre de 2006, fue conocida como Lágrima Ríos, se convirtió en una cantante afrodescendiente uruguaya que destacó en los cantos del candombe. Conocida también como «la perla negra del tango» y la «dama del candombe», se dice que «representa la más noble esencia del canto mestizo y negro». Su voz era potente, como afirmaba ella misma: «los negros tenemos las cuerdas vocales una pinta más gruesa que los blancos».
En su infancia, Lágrima Ríos vivió una vida de extrema pobreza. Siendo muy niña, su madre dejó la ciudad de Durazno, y vivieron entonces en diversos conventillos en la capital del país. Se mudaban muy a menudo, y su madre aceptaba cualquier trabajo. Conoció a Carlos Gardel a los tres o cuatro años, cuando este buscaba al guitarrista Carlos Portela en el conventillo en que vivían en Durazno 1182, su primer hogar montevideano. El recuerdo en sí de la figura de Gardel es probablemente mínimo; lo que una niña de tan corta edad recuerda es casi con seguridad el «alboroto» que se produjo en el conventillo al llegar el famoso cantante.
También vivió, siendo niña, donde su madre trabajaba como doméstica, cocinera y lavandera; oía en las vitrolas y radios de los vecinos guaranias, rancheras, pasodobles, coplas españolas; músicas y letras que memorizaba, cantaba y bailaba. A los tres años se le despertó el amor por el canto al escuchar los discos en las vitrolas que había en las casas donde la madre trabajaba. Lágrima Ríos trabajó como empleada doméstica en una casa de la calle 8 de octubre. En la casa de al lado había radio: así ella oía canciones de todas clases y las aprendía de memoria. La deslumbraba el piano que había en la casa, y apretaba sus teclas despacio para que no rezongaran. Trabajó también como cocinera en la familia de un agregado cultural de la embajada de Estados Unidos; a partir de entonces se compenetró con la música de los blues y otras melodías estadounidenses que cantaba con su particular gracia y emoción.
Lágrima cantaba en su casa hasta que alguien la escuchó, se interesó por ella y, con permiso de sus padres, en 1945, empezó a cantar junto a un guitarrista. A los dieciocho comenzó a cantar en los populares «recreos» de barrio, lugares donde la gente se reunía en las noches de verano. No imaginaba que su vida, cada vez más, iba a estar vinculada para siempre al canto.
La voz de Lágrima Ríos, por su excelente calidad y potencia, llamaba la atención del vecindario, y fue entonces cuando empezaron a invitarla a cantar en reuniones familiares, mientras que en la escuela era quien entonaba siempre el solo del himno nacional. En 1942, la invitaron a cantar en un local que se inauguraba. Ella tenía dieciocho años y fue la primera vez que lo hizo para el público.
En 1950, Alberto Mastra la integró a su trío y le puso el nombre artístico de Lágrima Ríos; con este conjunto estuvo bastante tiempo cantando tangos, siendo la primera mujer negra en hacerlo. Luego comenzó a salir en carnaval con José Antonio Lungo, que era del barrio. Después conoció a Emilio Riverón, quien tenía tres conjuntos.
También trabajó con Orosmán Fernández, como vocalista en su orquesta. Lágrima formó parte de «Brindis de Sala», grupo coral integrado por los hermanos Ramos, Luis Alberto Gómez y Juan Sequeira, que era un conocido integrante de conjuntos de carnaval. Este grupo interpretaba canciones a capella. Cantó con Danny Glover y Mary Wilson, actor y cantante estadounidenses; Danny estuvo recientemente en Mundo Afro. Lágrima hizo presentaciones con Celia Cruz, Aníbal Troilo, Roberto Goyeneche, Héctor Mauré y Alberto Castillo. Actuó en Madrid y Londres, y fue la primera cantante uruguaya y afrodescendiente que actuó en París, en La Sorbona.
En 1972 editó La perla negra del tango, que dedicó a su maestro Alberto Mastra. Se le otorgó la presidencia de Mundo Afro en 1995. Un año después cantó para la Tercera Cumbre Mundial del Tango realizada en Montevideo y en varias ciudades del interior de Uruguay.
Editó su primer disco compacto en 1997, llamado Cantando sueños, y en 1999 filmó el videoclip del tema «Danza Sur». Grabó en París un CD con Pájaro Canzani, exitoso músico uruguayo, cantando en una lengua africana. En 2005 hizo una presentación en vivo de la canción «Un cielo para los dos», junto a Gustavo Santaolalla, en el concierto brindado por el artista Luciano Supervielle en el Teatro Solís de Montevideo. Previamente se editó un DVD con el concierto llamado «Supervielle en el Solís», en el cual está incluida esta presentación, finalizando con todo el teatro de pie y aplaudiendo a este icono de la música uruguaya.
Actuó en la película documental Café de los maestros, dirigida por Miguel Kohan en 2008, y en el álbum Café de los maestros vol. 1 y 2, producido por Gustavo Santaolalla, en el que registró «Vieja viola», acompañada por Aníbal Arias, y «Un cielo para los dos», acompañada por Gustavo Santaolalla.
