“UTU es un sentimiento; es mucho más que un lugar de aprendizaje: es un hogar, una familia y un punto de partida lleno de experiencias y valores”, expresó su directora Mabel López.
Dirigiéndose a los invitados, la comunidad duraznense y las autoridades presentes, recalcó la importancia de la formación que brinda la escuela y recordó con emoción lo fundamental que es adaptarse a los cambios para «seguir siendo referentes de la excelencia educativa» en la localidad de Durazno.
El docente de historia, Alejandro Rosano, anunció la futura publicación de un libro que, a raíz de una ardua investigación, abarca con archivos fotográficos, testimonios y documentos la historia de la escuela. Mario Sappia, docente y exalumno, habló desde su experiencia y agradeció a los profesores, funcionarios y estudiantes que formaron parte de la escuela y aportaron su “granito de arena, manteniendo viva la llama de la educación”.
Por su parte, el inspector regional, David Cal, recalcó la importancia que el centro educativo tiene para él, donde también expresó el honor que sintió al formar parte del festejo. El aniversario tuvo unas últimas palabras del secretario docente de UTU, Osvaldo Rodríguez, quien habló del crecimiento de la institución en estas últimas décadas.
Rodríguez agradeció a los estudiantes y exalumnos, “que con su esfuerzo y dedicación han demostrado el verdadero valor de la educación” y también se refirió a la “labor ardua, llena de retos y recompensas donde, gracias al compromiso de los funcionarios docentes y no docentes, hemos logrado adaptarnos y seguir adelante”, expresó el secretario.
Sobre el final del acto, Raúl Laluz, estudiante de primero de bachillerato, interpretó una canción folclórica, previo a comentar el gran agradecimiento que tiene por el centro educativo.
La orquesta de UTU musicalizó el festejo donde, además de la entrada de los alumnos abanderados, entonar el himno e interpretar la marcha Mi bandera, cerró el acto con un original repertorio de canciones. Entre risas, bailes y acordes, la orquesta le brindó a la escuela de Durazno un anecdótico festejo en su octogésimo aniversario.
Luego, entre docentes, UTU y dirección, se le regaló a López, la directora del centro, una placa conmemorativa por tal festejo. Terminado el acto protocolar, en el patio de la escuela, el grupo de estudiantes de primer y segundo año de bachillerato gastronómico esperó a los invitados con un elaborado servicio de catering.
El festejo tuvo lugar en el gimnasio del centro educativo y contó con la presencia de autoridades de UTU, inspectores regionales y, además de la comunidad educativa, fue abierta a familias y vecinos de la zona.
La institución continuará con sus festejos durante todo el año, entre varias propuestas que han presentado los docentes y el equipo de dirección, se encuentran algunas exposiciones que se realizarán a lo largo de los próximos meses, con muestra sobre la historia de los uniformes de la institución y su evolución durante el tiempo, anécdotas relatadas por quienes fueron estudiantes de UTU durante estos 80 años, muchos de ellos convocados por sus propios hijos y nietos que actualmente también concurren a la institución, o docentes que han sido ex alumnos de la misma.
Se busca, sobre todo, crear el sentido de pertenencia tan necesario para los estudiantes de la Escuela Técnica que durante estos 80 años ha brindado formación en oficios ha muchísimos duraznenses; actualmente su oferta educativa está diversificada en varias propuestas que van desde administración, estética, técnicas textiles, formación en audiovisuales, sin descuidar la formación en diferentes asignaturas del área humanística y científica.