El programa que lleva adelante Camedur en coordinación con MAPEP realizará este viernes una jornada de salud en el marco del Mes de la Mujer, a la hora 17.30 en la Sala Lavalleja.
En una iniciativa conjunta entre la Secretaría Nacional de Deportes, ACE y CAMEDUR, la Lic. en Nutrición Magali Burgues y la encargada del Centro MAPEP Lic. en Educación Física, Fabiana Verdún. El programa “Por mi salud” reúne a profesionales de la salud, nutrición, enfermería, educación física entre otros, con el objtivo de tratar las enfermedades no trasmisibles, en forma voluntaria o por causa de una derivación del médico.
Los expositores en esta jornada serán la Dra. Sofía González, médica deportóloga, la médico fisiatra Virginia Ramos y la médico internista Mónica Huertas.
La jornada será dirigida al ejercicio y la salud, un tema que preocupa y reúne a las mujeres en un lema común “Por la salud de todas”.
Uruguay tiene una larga trayectoria de políticas sanitarias en beneficio del cuidado de la salud de las mujeres.Desde el Ministerio de Salud Pública se recuerdan hoy los avances que se han logrado mediante la implementación de prestaciones que hacen a la salud y derechos de las mujeres en todas sus diversidades en los últimos tiempos.
Un ejemplo de cuidado de salud de la mujer es que por ley se cuenta con un día al año de licencia especial, con goce de sueldo, para que trabajadoras de la actividad privada y funcionarias públicas puedan realizarse la mamografía y el Papanicolau (art. 2º, Ley N° 17.242), con exoneración de tasas moderadoras para las mamografías en mujeres de entre 50 y 69 años. A su vez, ambos estudios forman parte del control de salud (ex carné de salud).
Se destacan varias políticas que buscan la prevención, el diagnóstico precoz y el tratamiento oportuno de las patologías oncológicas mayormente vinculadas a las mujeres como el cáncer de mama y de cuello uterino.
Desde el año 2022 los dispositivos expansores de tejido mamario, las prótesis mamarias y la marcación del ganglio centinela (un estudio que se realiza a pacientes con cáncer de mama durante la cirugía) fueron incorporados al Plan Integral de Atención a la Salud (PIAS), lo que implica que son prestaciones que ahora deben brindar los prestadores de salud a las usuarias a las que se les haya realizado mastectomía por cáncer de mama o mastectomía reductora de riesgo de cáncer de mama, así como su recambio cuando sea indicado por el médico tratante(decreto 236/022).
Aquellas mujeres en edad reproductiva que se deban someter a tratamientos oncológicos que puedan afectar la fertilidad, tienen acceso sin costo a la preservación de gametos y recientemente se incorporó un nuevo medicamento de alto costo para el tratamiento del cáncer de mama en las prestaciones del Fondo Nacional de Recursos.
Desde el MSP se entiende que el cuidado de la salud de la mujer, sin importar su edad, es fundamental tanto para ellas como para su entorno. Se invita a reflexionar sobre el auto cuidado y a ejercer el derecho a la atención en salud en pos de obtener el mayor estándar de calidad de vida.
Además de eso, el deporte y la actividad física conciente constituyen una forma de cuidar la salud y prevenir enfermedades. Desde las etapas más tempranas todas las mujeres realicen actividad física. Si desde pequeñas vamos sumando salud, estaremos trabajando en beneficios a largo plazo que son innumerables. Integrar estos hábitos en la vida de las mujeres les permitirá disfrutar de ventajas y estar activas, no solo en estas primeras etapas, sino también a lo largo de toda su vida.
Si desde pequeñas se inculca el deporte y se crece con él, el hecho de ejercitarse pasará de ser una costumbre a ser una necesidad. Una de las claves para que esto suceda es entender que el deporte es un divertimento. Al final, es una actividad física en la que la persona se desarrolla mental y fisiológicamente. Practiquemos un deporte individual o en grupo, la base del deporte es compartir y esta base social es indispensable para disfrutar de la actividad física. Que una persona realice deporte de manera regular y supervisada es muy importante para mantenerse activa, vital y sana, independientemente del sexo.
Cada etapa de una mujer es distinta y cada mujer es distinta. Esa parte de personalización es necesaria: al fin y al cabo, tenemos que tener en cuenta la actividad que le gusta a esa persona pero,
además, qué es lo que le conviene. Por supuesto, también hay que contemplar cualquier posible patología que nos obligue a adaptar nuestro plan de entrenamiento. Otra asignatura pendiente en el caso de las mujeres es la importancia de los ejercicios de fuerza. Trabajar la fuerza en todas las etapas de la vida de una mujer es fundamental, es importante hacer hincapié en este aspecto y desterrar los falsos mitos que envuelven este aspecto. Podemos trabajar la fuerza de muchas maneras, y una de las más básicas es hacerlo con el peso de nuestro propio cuerpo o con pesos adecuados a nuestro nivel. Entrenar la fuerza no se traduce sistemáticamente en ejercicios de halterofilia, aunque muchas veces es la imagen que nos viene a la cabeza.
Gracias a la realización de actividad física, podemos disfrutar de múltiples beneficios cardiovasculares, endocrinológicos, para el control del peso, mentales y de fortalecimiento de los huesos gracias a los deportes de impacto. Los beneficios en el área de la salud mental son importantes, se realizó un estudio en EEUU con un grupo de deportistas que estaban tomando medicación antidepresiva. A la larga, la práctica deportiva que se incorporó en el programa hizo que, a las personas que participaban en el estudio, se les disminuyese la dosis de la medicación que estaban tomando porque no la necesitaban.
Cada fase de la vida de una mujer tiene unas recomendaciones deportivas diferentes principalmente según su estado hormonal. La menopausia es una etapa en la que hay que desmitificar en relación al deporte. Es cierto que se produce una pérdida de hormonas, pero la actividad física puede ayudar en algunos de los síntomas propios de la menopausia. Hablamos de osteoporosis, prolapso, sofocos y aumento de peso entre los más comunes. Realizar deporte durante la menopausia o empezar a hacerlo cuando estamos en esta etapa es muy recomendable, aunque hay que ir con cuidado y actuar de acorde al momento en el que nos encontramos.