La música siempre es la salida

“La música mi pasión, mi escape y la forma de comunicarme con el corazón” fue lo primero que nos dijo Marcelo Caraballo Irrazábal, el “astronauta” como lo conocen sus amigos, que desde hace un tiempo difunde su música electrónica en Durazno, después de muchos años de experiencia fuera del departamento.

  • Es profesor de educación física y vive a pleno sus dos pasiones, haciendo mover los cuerpos de la gente con entusiasmo. Tiene tres hijos, Marcelina de 11, Lorenzo de 7 y Nicolás de 2 años, que también son su motor. Sus comienzos con la música electrónica viene de lejos y la ha traído hasta acá para generar una prpouesta diferente.
  • “Siempre estuve involucrado con la música, música de todo tipo, con influencias de mis viejos sobre la música tropical, de mi tío que me hacía escuchar música en inglés. En mi casa siempre había música, todos la disfrutaban, bailando o escuchándola. De grande me fui a estudiar Educación Física en Maldonado, donde la música electrónica entró a mi vida y le tomé el amor a ese ritmo que me hacía moverme. Hace unos diez años trabajaba en el Hotel Conrad de mozo y ahí conocí este estilo” dijo.
  • “En el Conrad también pasaban música electrónica, en los bares, restoranes, la escuchaba todo el día y me enamoré de ella. Ahorré para comprar mi primer controlador, un mixer chiquitito casi de juguete donde empecé a mezclar música, en forma autodidacta, investigando por internet, probando, escuchando mucho y mezclándola, siempre refiriéndome a la música electrónica” agregó.
  • “El despegue y entrar del todo a este mundo hubieron varias causas que me hicieron profundizar y enamorarme de todo, querer predicar esto. Una de las causas fue mi hijo, que hace unos cinco años y medio le diagnosticaron que estaba dentro del espectro autista y para mi la música fue una forma de sobrellevar ese tema, a modo de terapia. Empecé a mezclar, a generar música, intentando desahogarme o contar historias a través de la música, fue mi mayor causa de empezar en esto, por Lorenzo, era mi escape, el escape de él porque también escuchaba y compartía la música, era nuestra forma de comunicarnos, fue mi forma de decirle al mundo lo que me pasaba, lo que me alegraba, me preocupaba, encontré esa salida” contó.
  • “La otra causa es conocer el ambiente de la cultura electrónica en el Uruguay, estudié en Maldonado y cuando nació mi hija me fui a Montevideo, terminé viviendo en la Costa y entré al ambiente del tecno, más allá de la música que me gustaba me llamó poderosamente el ambiente, es ameno, diverso, de predicar el amor, la paz, el gusto por la música haciendo diferentes gustos, la forma de comunicarse con el cuerpo, de bailar. En el caso del DJ de contar una historia, comunicarse, hacer mover a la gente, desde otro ámbito, porque estaba acostumbrado desde lo físico como profesor de educación física a hacerlos mover, pero hacerlo desde la danza, la música, trasmitido por un controlador y un parlante fue increíble”dijo.

Formación

  • Pasar música exige estudios, profesionalizarse y tener equipos de calidad que hagan vivir una experiencia única. “Estudié en DJ Acamedy en Montevideo, empecé a hacerme de mis instrumentos, de mis herramientas, parlantes, controlador nuevo, vas profundizando y mejorando la calidad de tus herramientas y la música. El género que más me gusta es el tecno-melódico, que lo llevo como una religión y después otros más bailanteros y de ambientación” indicó.
  • “Después de años de estar afuera, vuelvo a Durazno este año y en la cabeza siempre tuve traer lo que es la cultura electrónica acá. Quiero trasmitir esta movida, querer que la gente viva o vivencie las cosas que tiene para enseñar todo esto, diversidad, cultura, pasión, cosas hermosas que vengo con ganas de trasmitir y que experimenten muchas personas de la ciudad” dijo.
  • “Empezamos una movida con Karen que se llama Sesión Sunset, que la gente del Parador nos dio la oportunidad de realizar, hice algunas despedidas de fin de año, en la peluquería de Johana, con algunos de entrenamiento ya que mi hermana Andrea Caraballo tiene su grupo y quería que mi estilo se conociera, se dio así y seguimos en el Parador y el Chiringuito, el bar que está en la playa,
  • donde estaremos martes y jueves haciendo eventos, promocionando, promulgando y difundiendo esta cultura, que traemos para trasmitir” agregó.
  • Sobre la respuesta de la gente contó que “ha sido muy buena, en las presentaciones siempre se acerca alguien, nos pide el número para ver si estamos haciendo eventos particulares, nos consultan sobre la música, sobre el nombre, creo que es el inicio de una movida que va a ser importante en el interior del país y en Uruguay también”.

 

Siempre

  • La música fue algo cotidiano en la vida de Marcelo, pero este estilo logró enamorarlo para siempre.“Siempre escuché todo tipo de música, me gusta en general, pero este género me atrapó y me agarró en un momento de mi vida que necesitaba trasmitir y comunicar lo que me estaba pasando, fue la mejor forma de hacerlo, a través de lo musical”.

Su lema: “la música siempre, la música es la salida”.

  • Marcelo puede ser contactado a través de su instagram @solygroove, nombre que proviene de la unión de la ciudad de donde estaba viviendo Solymar y groove que es como el alma de la música, que te hace bailar inconcientemente, no se ve pero está. También se puede contactar por el celular 099448770 y lo pueden escuchar en su radio online “Solygroove radio”.
  • “El logo que tengo es un astronauta con un casco azul, haciendo referencia al autismo de mi hijo, porque representa mucho en mi vida y defiendo eso a muerte, promulgo todo lo que tiene que ver con la enseñanza y trato con las personas con autismo. El casco, porque me enchufaba los auriculares y entraba en un nuevo espacio, que compartí con mi hijo también ya que lo vivió plenamente, quedaba feliz, bailaba, muchas veces logré calmarle algún que otro berrinche con la música, cualquier cosa puede estresar a una persona con autismo y un auricular con música suave ha sido muchas veces un freno para eso” finalizó diciendo.