Avances del Sistema de Cuidados hacia 2024

El año que pasó el Sistema Nacional Integrado de Cuidados afianzó su presencia en todo el territorio, continuó trabajando en nuevos planes que atienden a necesidades históricas y comenzó a trabajar por su sostenibilidad. En cuánto a la infancia, en 2023 aumentamos el número de Becas de Inclusión Socioeducativa (BIS), alcanzando hoy las 1.721 becas activas.

Se crearon la figura del Facilitador de Autonomía en Ámbitos Educativos, que será un apoyo fundamental para los niños y niñas en situación de dependencia dentro de los centros educativos. En este sentido, lograron que la Ley de Rendición de Cuentas le otorgara un presupuesto específico al programa, mediante el que se podrá desarrollar en todos los departamentos del país.

Ya seleccionaron a las primeras 40 escuelas, así como las y los Facilitadores para cubrirlas. Se inició la formación en los centros, en febrero comenzará la formación a Facilitadores, y en marzo, se estarán seleccionando 300 escuelas más.

En cuánto a los adultos en situación de dependencia, se sigue trabajando en el Programa de Apoyo al Cuidado Permanente (PACP), una iniciativa de esta gestión por la que ya realojaron a 46 personas que estaban en Establecimientos de Larga Estadía para Personas Mayores (ELEPEM) que no reunían las condiciones sanitarias necesarias. Por otra parte, siguen trabajando para mejorar el Programa de Asistentes Personales.

Se han invertido 40 millones de dólares en el mismo, lograron que 1.800 asistentes personales culminaron su formación, y se concretó un convenio con la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII) y el Grupo Banco Interamericano de Desarrollo (BID Lab), para desarrollar una solución informática para el intercambio de información y gestión de procesos entre asistentes y asistidos.

Además, se continúa avanzando en la modalidad de Provisión Colectiva, contando hoy con 12 cooperativas de Asistentes Personales activas en los departamentos de Salto, Paysandú, Tacuarembó, Colonia y Maldonado; con 85 relaciones laborales en el marco de esta modalidad. Por otra parte, se logró la exoneración del IVA para cooperativas de trabajo, y sus trabajadoras obtuvieron “categoría laboral” ante el BPS. Esta nueva modalidad ha comprobado ser un medio eficaz de acompañamiento y certeza jurídica para todas las partes involucradas.

En cuanto a la sostenibilidad, nos hicimos cargo de uno de los grandes temas pendientes del Sistema de Cuidados, definiendo a este como una inversión necesaria para el país.

En ese sentido, se incorporaron dos artículos (297 y 298) en la ley de reforma de la Seguridad Social, mediante los que se crea una Comisión Técnica que estará a cargo de “presentar una proyección completa y conjunta de la Previsión Social y el Sistema de Cuidados, para un horizonte de 30 años”.

Por último, siguen trabajando en todo el territorio nacional, visitando las oficinas territoriales y los dispositivos de Cuidados distribuidos en todos los departamentos; donde se interiorizan con las realidades locales y trabajan para efectivizar el alcance y cobertura de los programas.

Además, durante todo el proceso continuamos promoviendo la Humanización de los Cuidados como una idea transversal a todos los planes y programas, fomentando un cuidado centrado en las personas.

Algunos de estos beneficios son las becas. El objetivo de las Becas de Inclusión Socioeducativa (BIS) es brindar servicios de cuidado y educación a niños y niñas de 0 a 2 años (en excepciones, de 3 años) pertenecientes a familias integradas a los programas de Acompañamiento Familiar del MIDES e INAU, que residan en territorios con insuficiencia de oferta de estas características.

El objetivo de las Becas de Inclusión Socioeducativa (BIS) es brindar servicios de cuidado y educación a niños y niñas de 0 a 2 años (en excepciones, de 3 años) pertenecientes a familias integradas a los programas de Acompañamiento Familiar del MIDES e INAU, que residan en territorios con insuficiencia de oferta de estas características.

De esta forma, se busca contribuir en la ampliación y consolidación de la oferta de cuidados y educación infantil, mediante mecanismos de gestión asociativa con centros privados de educación y cuidados, que permita la mejora continua en la calidad de sus servicios.

Para acceder a una beca BIS en primer lugar un operador de los programas vinculados realiza la derivación a través de un formulario en línea, posteriormente la Secretaría de Cuidados recibe la información y se encarga de la gestión de la beca, luego se analiza la residencia del niño/a, las necesidades específicas de la familia y hace una búsqueda por zona de la información e identifica un centro educativo habilitado con plazas disponibles.

Se toma en cuenta: la distancia del hogar al centro educativo y el transporte disponible, las necesidades y dificultades específicas de la familia, que la familia pueda cubrir los requisitos solicitados por el centro, la capacidad de la familia para sostener la rutina y actividades asociadas a la inclusión del niño/a en el centro educativo, el apoyo para el desarrollo personal de los adultos referentes.

Esta información es devuelta al operador territorial para que junto a la familia evalúe la mejor alternativa, una vez resuelto, el operador informa a la Secretaría de Cuidados para iniciar la habilitación de la beca.

Estas becas van dirigidas a niños y niñas de 0 a 2 años (en excepciones, de 3 años) pertenecientes a familias integradas a los programas de Acompañamiento Familiar del MIDES e INAU

Otra de las propuestas, basada en la infancia, es Uruguay Crece Contigo. Uruguay Crece Contigo (UCC) es una política pública de cobertura nacional, que apunta a consolidar un sistema de protección integral a la primera infancia. Para ello se propone el desarrollo de acciones universales y focalizadas que garanticen los cuidados y protección adecuados de las mujeres embarazadas y el desarrollo de niños y niñas menores de 4 años, desde una perspectiva de derechos, género y generaciones.

Los cometidos son llevar a cabo acciones socioeducativas para promover buenas prácticas en las familias, que mejoren la calidad de vida y favorezcan el desarrollo infantil integral y adecuado.

Disminuir la incidencia de los factores de riesgo socio-sanitarios que condicionan el crecimiento y desarrollo de los niños y las niñas menores de 4 años. Para ello se promueve el adecuado control de salud desde el comienzo del embarazo, el monitoreo del estado nutricional, se orienta sobre pautas de crianza y estimulación del desarrollo infantil, se brinda consejería sobre lactancia materna y prácticas de alimentación, se orienta sobre entornos saludables, prevención de enfermedades y accidentes y se fomenta la participación activa del padre en la crianza de niños y niñas. En este punto, se desarrollan acciones universales complementadas con estrategias específicas para atender las situaciones de mayor vulnerabilidad.

Generar conocimiento útil para el diseño, monitoreo y evaluación de las políticas de protección integral dirigidas a la Primera Infancia, a través de la articulación interinstitucional de la información existente, la generación de información necesaria y el desarrollo de la investigación en temáticas específicas que lo requieran.

Contribuir al mejor funcionamiento de las instituciones, redes y dispositivos territoriales, para garantizar un mejor desarrollo del sistema de protección social vinculado a la primera infancia.