Es un proyecto desarrollado por el Ministerio de Salud Pública y Unicef con el objetivo de brindar a embarazadas, sus familias y entorno cercano información útil y accesible para transitar un embarazo saludable.
Se trata de información útil y relevante vinculada a la etapa que se desarrolla durante el embarazo. Referentes de los diversos temas hablan sobre la importancia de la consulta preconcepcional, de los controles médicos, del rol del papá y sobre cómo enfrentar los miedos que naturalmente pueden aparecer durante este período. Consejos y recomendaciones sobre el cuidado de la alimentación, de la salud bucal y de la salud mental son algunos de los contenidos que se encuentran alli.
La búsqueda del embarazo es un buen momento para coordinar una consulta preconcepcional para evacuar dudas, tomar acciones preventivas y realizarse un examen físico que permita anticipar y reducir riesgos.
Una vez confirmado el embarazo, es importante planificar los cuidados y controles médicos.
Hasta la semana 32 se recomienda que los controles se realicen una vez al mes, luego a partir de la semana 33 cada 15 días y desde la semana 37 una vez por semana.
Cuando se acerca el momento del parto es esperable que aparezcan algunos miedos: lo desconocido muchas veces asusta.
Por eso, prepararse para el nacimiento de un hijo es tan importante. ¿Qué características tienen los cursos de preparación para el nacimiento? La educación para la salud es clave en el logro de una mejor calidad de vida de los individuos. En base a programas estructurados de educación prenatal que incorporan las recomendaciones de OMS y UNICEF sobre los beneficios que representan ciertas prácticas para la mujer embarazada y su familia, es posible transmitir información de calidad en base a derechos que mejoran la calidad de la atención
La educación en la etapa prenatal, contribuye a la preparación física y psicológica de la mujer para afrontar el embarazo y los cambios que se van a ir presentando, el parto, su recuperación en el puerperio y a que la vivencia de todo el proceso sea lo más armoniosa posible, tanto para la madre como para su pareja o acompañante. A la vez se transmite la importancia de fortalecer el vínculo afectivo con su bebé, prácticas de crianza, maternidades y paternidades corresponsables y otros factores que favorecen o dificultan el normal desarrollo y crecimiento.
El Curso de preparación para el Nacimiento ofrece una valiosa oportunidad de integrar un colectivo con los mismos intereses y preocupaciones, que atraviesa una etapa de especial sensibilidad y de recibir información calificada en el momento oportuno, lo cual genera autonomía y responsabilidad a la hora de tomar decisiones o brindar consentimiento.
La educación para el nacimiento es uno de los componentes más importantes hacia el logro de un parto humanizado, siendo éste un derecho de los individuos y un objetivo sanitario del MSP. Todas las mujeres tienen derecho a recibir el más alto nivel de cuidados en salud, que incluyen el derecho a una atención digna y respetuosa en el embarazo y en el parto sin violencia ni discriminación, siendo obligación de las instituciones del SNIS garantizar este derecho.
La Organización Mundial de la Salud recomienda la preparación para el nacimiento por sus efectos beneficiosos maternos y perinatales, que según evidencia científica favorece: menor grado de ansiedad, manifestando una actitud positiva, mayor asistencia al control prenatal, mayor disfrute del embarazo y el parto, mejorando su calidad de vida y percepción del proceso, mayor y mejor participación de la pareja. Apoyo hacia la mujer durante todo el trabajo de parto, brindando seguridad y mayor contención emocional, adecuada respuesta a las contracciones utilizando las técnicas de relajación, respiración, etc., menor duración total del trabajo de parto, menor uso de fármacos en general, menor incidencia de cesáreas, mejor vínculo con el recién nacido y mayor aptitud para una lactancia natural.
La modalidad de trabajo buscará generar espacios en los cuales las participantes se sientan contenidos y que favorezca la expresión de sentimientos y temores, especialmente de las mujeres embarazadas. Se utilizarán técnicas que permitan trabajar sistemáticamente y de forma estructurada, los aspectos cognitivos, emocionales, de habilidades, etc. Además, es relevante habilitar la oportunidad de expresar, analizar, reflexionar y compartir las ideas previas de las participantes sobre todos estos aspectos.
El contenido del taller será complementario a la información que se brinda en la consulta obstétrica, haciendo hincapié en aquellos temas que por su importancia o por razones operativas son más sencillos abordar en una dinámica grupal. Se debe evitar realizar clases magistrales, buscando dinámicas que promuevan la participación y el planteo de inquietudes de los participantes relacionados con temas de embarazo, parto, crianza, autocuidado y vínculos. Será de particular importancia favorecer la explicitación de las contradicciones entre saberes populares y conocimientos técnicos (conflicto pedagógico), para generar una síntesis nueva que facilite el cambio de las prácticas en la vida cotidiana.
En la medida de lo posible se habilitarán espacios de atención diferenciada a las adolescentes embarazadas creando grupos específicos con la perspectiva de la maternidad en esta etapa y brindando especial atención a los casos de maternidad forzada. Si el número de adolescentes no justifica la creación de un grupo, en los talleres que integren embarazadas adolescentes se enfocarán los temas en forma particular en referencia a esta etapa de la vida.
Se destaca, además, que a partir de la ley N° 19.167 (de Reproducción Humana Asistida) se ha facilitado la gestación en parejas integradas por mujeres, para lo cual los equipos de salud deben estar abiertos y capacitados. Durante el proceso del grupo y a medida que se profundiza en el conocimiento de sus integrantes, podrían detectarse situaciones que requieren un abordaje individual (depresión, no aceptación del embarazo, consumo de sustancias psicoactivas, violencia basada en género, diagnóstico de malformaciones congénitas, etc). En estos casos se coordinará una entrevista con el Ginecólogo, Médico, Obstetra Partera tratante u otros perfiles profesionales que puedan colaborar en el abordaje de la situación.
Se deberán crear materiales institucionales de apoyo al curso que reafirmen o complementen los contenidos del mismo. Se deberá entregar a las parejas copia de los consentimientos informados de parto y cesárea para su conocimiento. Se deberán aclarar dudas al respecto de los mismos.
Durante las dos horas de duración de cada taller se integrarán actividades de educación para la salud, intercambio de información, evacuación de dudas, etc. y la práctica de ejercicios beneficiosos para la gestante (ejercicios respiratorios, verticalidad y el movimiento en el parto, relajación conciente, masajes, manejo no medicamentoso del dolor, ejercicios piso pélvico, etc.) en los cuales se incorporará a la pareja o acompañante.
Se deberá respetar la diversidad en la percepción que cada una tiene sobre su historia y significación del cuerpo. Se aplicarán dinámicas de juegos, lecturas compartidas, PPT, videos, y más. Estos temas se irán introduciendo en cada taller, en forma progresiva y a cargo de los profesionales correspondientes de acuerdo al tema que se trata.
Los cursos deberán abordar los siguientes contenidos en base a la mejor evidencia científica, los derechos y con perspectiva de género y generaciones: es necesario que se incluyan los siguientes temas: importancia del control pre-gestacional, obstétrico y neonatal. Objetivos, ventajas y resultados; importancia y objetivos de la preparación para el nacimiento; cambios fisiológicos del embarazo; hábitos saludables en el embarazo. Nutrición. Higiene. Trabajo. Sexualidad; derechos de la gestante y su pareja. Licencia maternal y paternal; síntomas y signos de consulta precoz; trabajo de parto y parto. Etapas del mismo. Duración. Sintomatología esperable. Resultados; derechos en la asistencia al nacimiento. Prácticas para el nacimiento respetado. Prácticas recomendadas y no recomendadas en la asistencia del parto. Consentimiento informado.
También se deberá informar sobre métodos no farmacológicos y farmacológicos para el manejo del dolor, cesárea y Forceps. Posibles indicaciones. Riesgos. Consentimiento informado; llegada del Recién Nacido. Cuidados, estimulación, desarrollo; cambios , cuidados y motivos de consulta en el puerperio; lactancia materna. Fomento vínculo madre – hijo – padre; anticoncepción.
La Institución debe dar a conocer el Plan de Curso para el Nacimiento a todo el personal de salud, especialmente aquellos que están en atención directa con mujeres embarazadas, parto y recién nacido, para mejores resultados, capacitar al personal de salud sobre asistencia respetada del nacimiento.