Hace varios años funciona en nuestra ciudad el equipo “Callejeras handball club” que junto a “Durazno handball club” llevan adelante esta propuesta deportiva.
“En estos momentos estamos buscando que se sumen mujeres al deporte” contaron “estamos haciendo una práctica combinada los martes y jueves desde las 21 horas a 22:30 horas en el Estadio Cerrado y la práctica está abierta todo público, el que se quiere sumar, genial. Nosotros venimos a buen ritmo este año, le hemos metido bastante hemos competido, hemos salido, pero hemos apuntado más a la realidad de que se incorpore gente nueva y enseñarle a los que se sumen, para que crezca el handball en Durazno”.
“Enseñar lo que es el deporte y a la vez competir son los dos hilos que hemos seguido este año, justamente Durazno lo que tiene es que el deporte es muy de las mujeres, muy de género femenino” agregaron.
“Lo fundamental para integrarse son los valores, la buena voluntad, buena disposición y ser buena persona, estar dispuesto a aprender, porque lo primero está lo extra deportivo, lo deportivo viene con el tiempo, el aprender técnicas y el funcionamiento, eso se da con las prácticas, los valores tienen que estar, es lo primero que queremos trasmitir” contaron.
“Los resultados son algo que quedan en la cancha, pero afuera tenemos que estar siempre juntos, así que el que quiera venir es simple, llegar con buena voluntad” dijeron.
La propuesta deportiva se encuentra en instagram como callejeras handball y desde ahí pueden comenzar a vivir la experiencia.
El handball llegó a Uruguay a través de Antonio Valeta, que presenta en nuestro país el 25 de agosto de 1918 este deporte llamado inicialmente Balón. Para un país amante del fútbol, este deporte que se jugaba en la misma cancha, similares marcaciones y arco pero con la mano, fue toda una novedad.
Pero lo más relevante del Balón es el motivo de su creación, así como aspectos del pensamiento humanista de su creador reflejado en toda la historia de este juego, este nuevo deporte, que fue ideado no tiene otros fines que moralizar el ambiente deportivo, hacer que ambos sexos puedan gozar de la «cultura física» al aire libre, con un juego nuevo si, pero noble, sano y de grandes beneficios para la salud.
Sin duda el deporte es un hecho cultural que muestra la idiosincrasia y la cultura de un país. El Balón es un ejemplo de lo que Uruguay debe querer para sus deportistas. A los 90 años de su presentación, el Balón mantiene total vigencia. Su filosofía, su historia, el pensamiento de su creador, merecen que sea reconocido como Deporte Nacional para que, a través de él, nuestro país rescate lo mejor de su identidad. El Balón Uruguayo vive en cada jugador de handball del Uruguay. Su espíritu de juego limpio, de educación deportiva, debe hacerse sentir en cada uno de los deportistas.