En el marco de las actividades formativas de las Direcciones Técnicas de Gestión Educativa y Gestión Académica, las Inspecciones de Áreas asignaturas de Física, Química, Biología y la Inspección Regional Montevideo Centro, convocan al taller sobre Metodologías Activas a cargo de la Mag. Prof. Virginia Martínez.
El mismo está dirigido a docentes de ciencias de los Centros educatvos con propuesta de Educación Básica Integrada, fortaleciendo las salas nacionales planificadas para el día 25 de noviembre.
La Magister Virginia Martínez es Profesora de Física, Ayudante Preparadora de Física, Magister en Metodologías Activas de la Enseñanza.
Desde la década de 1990, las aulas no se volvieron más grandes sino más diversificadas en cuanto a las capacidades, motivación y base cultural de los estudiantes. Los modelos de clase magistral y tutoría tradicional perdieron vigencia en clases en donde era cada vez más complejo mantener un alto nivel académico. Paulatinamente se fue asimilando que la enseñanza de calidad consistía en estimular a los estudiantes para utilizar los procesos de aprendizaje de forma espontánea, cobrando así relevancia el papel del estudiante por encima del papel del profesor (López, 2002, 9).
Lo anterior nos remite a lo que hoy se conoce como «metodologías activas» que, en esencia, retoman tres ideas principales: El estudiante es un protagonista activo de su aprendizaje; El aprendizaje es social. Los estudiantes aprenden mucho más de la interacción que surge entre ellos que solamente de la exposición; Los aprendizajes deben ser significativos. El aprendizaje requiere ser realista, viable y complejo de forma que el estudiante halle relevancia en la transferencia de dicho contenido. Para que se produzca un aprendizaje significativo, deben producirse dos condiciones: Presentación de un material potencialmente significativo.
Lo anterior implica que posee un significado lógico, es decir, relacionado de forma sustantiva con la estructura cognitiva de quien aprende. Además, un material potencialmente significativo cuenta con ideas anclaje, que facilitan la interacción con el sujeto que aprende; Actitud potencialmente significativa de aprendizaje por parte del educando. Implica que se tiene la voluntad del educando para aprender.
Los aprendizajes significativos guardan suma relevancia en las metodologías activas de aprendizaje, pues los estudiantes –hoy más que nunca– buscan que lo aprendido guarde relación con lo previamente aprendido, pero sobre todo que sea un contenido relevante, comprobable y con aplicación en la vida diaria.
Aun cuando el estudiante es el protagonista de su aprendizaje, requiere de la función directiva del profesor, quien no sólo presentará la cultura y el aprendizaje en general de forma atractiva, sino que además deberá conseguir que, quien aprenda, «construya» sus contenidos y los transforme en aprendizajes. Cabe destacar que las metodologías activas juegan un papel relevante para lograr dicho cometido.
Las metodologías activas promueven, principalmente, dos características del aprendizaje: Sociabilidad del aprendizaje. Para que una persona aprenda, debe lograr la interacción con otros; fomentar y favorecer el diálogo e intercambio de ideas; Interactividad del aprendizaje. El uso de las nuevas tecnologías ayuda a la generación de comunidades de aprendizaje, facilitando la interacción y trascendiendo las barreras del tiempo y la distancia.
Hoy existe gran diversidad de metodologías activas. Conocer su fundamento permite a los profesores identificarlas y seleccionar aquéllas más a fines a los estudiantes y a los contenidos.
Algunas de las metodologías activas son: Aprendizaje cooperativo. Es el proceso de aprender en grupo y en comunidad. Pretende la formación de comunidades de aprendizaje, entendidas como un grupo de personas que, reunidas en un lugar y tiempo determinados, se ocupan de una tarea que les exige asumir funciones específicas e interactuar para el logro de una meta en común; Enfoque por competencias. Dentro del ámbito académico, «las competencias se definen como las acciones que el alumno deberá ser capaz de efectuar después del aprendizaje»; Aprendizaje basado en problemas. Consiste en un enfoque inductivo en el que los estudiantes aprenden el contenido de la sesión a través de la resolución de problemas reales; Método del caso. Se fundamenta en el análisis de una situación real o hipotética a través de una discusión dirigida, en la que se pretende conocer la diversidad de opiniones y favorecer el intercambio de experiencias; Enfoque cerebral del
aprendizaje o «cerebro que aprende». Hace referencia a las bases neurofisiológicas del aprendizaje. Implica ponderar la estructura cerebral así como su influencia en el aprendizaje. Concentra todas aquellas teorías sobre la estimulación de los procesos mentales; Interactividad del aprendizaje. El concepto de interactividad es inherente a los procesos de comunicación, pues para que exista comunicación es imprescindible la interacción entre los participantes (ya sean personas, o bien surgir entre personas y cualquier dispositivo de las tecnologías de la información y la comunicación). Esta metodología, favorece la relación en comunidades de aprendizaje de forma asíncrona.