El joven duraznense de 18 años de edad, seguirá jugando en el club que lo vio surgir; Cardos Rugby, porque entiende que fue la institución que le dio la posibilidad y lo hizo trascender en el ámbito del deporte de la “ovalada”.

Por Víctor Darwin Rodríguez VDR Producciones

En entrevista en la redacción de Página Cero, habló de sus inicios, de cómo se vinculó al rugby y de su experiencia en el Mundial de Kenia, siendo uno de los pilares de los “Teritos”, la selección Uruguaya de Rugby M20.

“Poder representar a Durazno y a Uruguay es un orgullo tremendo, la verdad no me entra en el pecho el orgullo porque tanto que lo peleé, lo conseguí”, señala, agradeciendo el “recibimiento de la gente, las palabras, el apoyo, que es algo hermoso”.

“Yo arranqué jugando al fútbol como todos, viste que de niño te regalan una pelota y corré detrás; en baby jugué en el Artigas, en Sub 15 en Rampla Juniors y en Sub 17 en Sportivo Yi; arranqué en baby de defensa y después los otros años de golero”, rememora.

Pero luego, a los 15 años de edad, comenzó a incursionar en el deporte al que hoy se dedica, “un amigo me invitó a jugar al rugby; yo no quería a lo primero, porque tenía el miedo ese de decir me van a ‘matar’, o me voy a lesionar y eso te echa un poco para atrás, pero fui, probé, no entendí mucho la verdad, el primer día no entendí nada, pero me fui con un gustito lindo y me encantó y le metí ganas acá en el Club Cardos, que por suerte me fueron inculcando, me fueron enseñando tanto el técnico como mis compañeros y gracias a ellos pude llegar a representar a la selección (uruguaya)”, comentó.

Agradecido con sus referentes

Agrega que inició desde ‘cero’ a los 15 años “y gracias a tener contacto con varias personas, referentes en esta disciplina deportiva a Víctor Morán “le decimos cariñosamente el “negro Víctor”, y Sergio “Muñe” Alonso, que no jugaba en mi posición, era el otro pilar, pero siempre me dio mucho consejo; gracias a ellos pude sumar un montón en el deporte, como con Nicolás Balparda que es el técnico, con el “negro” Adrián Mon, Ignacio “Nacho” Erramuspe, con todos esos referentes que me ayudaron bastante y me hicieron conocer muy rápido como era el sistema de juego, como se trataba, que teníamos que hacer, que gracias a esa importancia que me dieron en enseñarme yo pude aprender rápido”.

Destaca además la presencia y vigencia de Cardos Rugby, señalando que “si no lo tuviésemos, lo más cercano que hay es Flores, pero no se me pasaría por la cabeza ir a Flores o a Montevideo a practicar, capaz que si por el estudio me iba a Montevideo, sí probaría, pero gracias que está el club acá y yo estoy estudiando acá todo perfecto”.

Mundial S20 con “Teritos”.

La convocatoria a integrar la preselección y luego quedar en el plantel definitivo para el Mundial de Kenia fue algo “maravilloso”, señala Duban Silvera, que juega en la posición de pilar derecho.

No sabe a ciencia cierta aún, en qué momento o que facetas le observó el cuerpo técnico para ser convocado a Sub 20, “la verdad no sé, no tengo conocimiento, quiero creer que fue porque me vieron jugar y capaz que le gustó”, agregando que el DT lo llamó en el mes de diciembre para integrar el plantel de la pre temporada para el mundial “le dije que sí, era una locura tremenda para mi, tuve que conversar con mis padres a ver qué pensaban ellos, y aunque los viajes (a entrenar en Montevideo) era ya a lo último medio cansador porque hubo momentos del año que entrenábamos cuatro veces por semana, en los que iba y me quedaba dos días, valió la pena”, “cuando veo que sigo quedando, sigo quedando, me siguen teniendo en cuenta (en el núcleo definitivo) y me daban importancia, me daba alegría y bueno, vamos a seguir y ta’ se pudo dar por suerte”.

Duban, fue el único jugador del plantel nacido y que aún reside en el interior del país; hizo referencia también a otro duraznense que estuvo convocado, Damián Figueira, transmitiendo su optimismo de que puedan estar nuevamente juntos en futuras convocatorias, al señalar que “estuve con Damián, tuvo la mala suerte de no quedar, esperemos que para esta preparación sí esté y para el mundial que viene también”.

Tiene claro que definitivamente este es “su” deporte, y habló de su anhelo de poder seguir creciendo, vestir la Celeste e intentar llegar en 2027 a ser seleccionado en los «Teros».

Finalmente no dudó en afirmar que “mis miras son por el momento quedarme en Cardos, mi incitaron a que vaya a Montevideo, de que me vaya a jugar a diferentes clubes, pero no, yo prefiero quedarme en Cardos, porque fue el equipo que me vio nacer por así decirlo en el deporte y gracias a ellos yo llegué a jugar un mundial, entonces que más que quedarme con ellos y a futuro espero poder integrar el año que viene la selección nuevamente de M20 y si se puede dar entrenando, metiéndole y para el 2027 poder llegar por lo menos a una convocatoria para una preselección estaría perfecto, pero mis miras ahora son entrenar y jugar con Cardos”, concluyó.