Salud para la infancia: una vocación

La pediatra María Bocchiardo es una referente en la atención de salud en nuestro departamento, por eso nadie mejor para consultarle sobre la situación sanitaria que hoy se está viviendo en torno a los niños pequeños por los virus invernales, las formas de prevenirlo y atenderlas adecuadamente.

“El virus que está afectando en realidad está compuesto por varios, no hay pandemia del Covid, hay casos pero aislados pero no en niños. Tenemos los virus comunes de todos los inviernos y el que más nos está preocupando es el sincicial respiratorio, el virus principal causante de la bronquilitis sobre todo en niños menores de dos años, que causa cuadros graves, severos, rápidamente evolutivos, que muchas veces requieren oxigenoterapia, oxígeno de alto flujo, ventilación mecánica. Los otros virus comunes de los inviernos, el de la influenza, hemos visto mucha influenza A en niños pequeños, adenovirus, todos los virus comunes en el invierno que también pueden causar bronquilitis u otros cuadros respiratorios como neumonitis, bronquitis o en las vías respiratorias altas” dijo.

“En realidad estos virus son más severos en los niños pequeños porque la vía respiratoria tiene menor calibre y mas fácilmente se obstruye, en mayor medida por la enorme cantidad de secreciones, por lo que generalmente no responden a los brocodilatadores, por lo que la respuesta ante el tratamiento es más compleja” agregó.

“Se puede prevenir evitando el contacto con infecciones respiratorias intrafamiliares, lo cual es difícil cuando hay hermanos chicos, evitar la concurrencia de niños a lugares donde hay muchas personas, no hay que llevarlos a los centros educativos cuando están enfermos por la posibilidad de contagios. La otra gran medida es la vacunación antigripal, que si bien no es obligatoria, está recomendada en los niños de seis meses hasta los cinco años y sobre todo en este año que hay una mayor incidencia de los virus, de evoluciones a cuadros severos, la vacuna protege justamente de las formas severas de la enfermedad. Hay disponibilidad de vacunas, se puede vacunar toda la familia, es una pena que no hubo una campaña más activa y vemos mucha gente que no se ha vacunado dentro del grupo de riesgo” indicó.

Con respecto a la incidencia de estas vacaciones adelantadas en la evolución del virus y sus efectos, la profesional destacó que aún no se han detectado cambios.

“Las vacaciones siempre han tenido como objetivo cortar las enfermedades infecciosas, no hemos visto los resultados, se van a ver más adelante porque justamente esta interrupción de la concurrencia a los centros educativos evita muchos contagios. Son importante otras medidas como favorecer el teletrabajo porque si los adultos se contagian estamos en la misma situación. Los efectos se verán hacia fines de julio” dijo.

“Es importante la consulta precoz, tener en cuenta los signos de trabajo respiratorio que es el tiraje intercostal, cuando se le marcan las costillitas al respirar, que lo encuentren fatigado, que se le dificulte alimentarse o tenga fiebre alta. Cuando antes se inicie el tratamiento podemos evitar esas formas más severas, igualmente aún con la consulta precoz y el tratamiento adecuado pueden evolucionar hacia cuadros severos, porque depende muchas veces de las condiciones del niño y del virus” agregó “ventilar los ambientes, la higiene frecuente de las manos, el uso de pañales desechables, taparse con el codo cuando se tose, usar el alcohol en gel, son medidas importantes a tener en cuenta”.

María trabaja en la atención a los niños desde hace muchos años, con una responsabilidad que la ha convertido en referente.

“Soy médico pediatra, hice la especialización en pediatría y luego en neonatología, estoy cerca de la jubilación, he disfrutado mucho, he trabajado mucho, he tenido grandes logros en la profesión que me llenan y me encanta lo que hago. Actualmente estoy haciendo una diplomatura en neurodesarrollo, porque trabajo desde hace años en la Unidad de Atención Temprana de ASSE, sobre todo con recién nacidos de alto riesgo, vemos también otros niños que no fueron recién nacidos de riesgo pero que en los primeros años de su desarrollo neurológico aparece algun trastorno, hacemos evaluación y tratamiento, es una área fascinante sobre la cual ahora estoy

haciendo la diplomatura” contó.

“He trabajado toda mi vida en ASSE, en todas las áreas, en atención, en gestión, actualmente en las policlínicas, en San Francisco y en Cobusu, una vez al mes en San Jorge y en la Unidad de Atención Temprana. También trabajo en Camedur, en policlínica y sanatorio. Desde hace más de veinte años trabajo en el CTI pediátrico neonatal de Paysandú, un área que me gusta bastante” agregó.

“Me gusta mucho la vida de CTI, la adrenalina de los pacientes críticos, especialmente en mi área de los prematuros severos, pero no podría hacer solo eso. Me gusta siempre que pueda hacer atención primaria, me encanta, acompañar el desarrollo de los niños, su crecimiento, la tarea de los padres, la vigilancia del neurodesarrollo, poder afectar en la prevención e intervenir en cosas que pueden cambiar la vida de los niños para lograr su óptimo rendimiento y posibilidades. Hay niños sanos y otros con discapacidades, pero siempre tienen un potencial que puede ser desarrollado al máximo, esto depende muchísimo del ambiente entonces estimular esto, lograr las estrategias necesarias es un desafío importantísimo y me encanta dentro de la pediatría” dijo.

La compañía perfecta para este trabajo ha sido siempre su familia.

“Tengo una preciosa familia, mi marido, mis dos hijas ya adultas, profesionales, verlas felices en lo que hacen es realmente un orgullo para mí. Tengo la suerte de que vivimos cerca, con mis hermanos, mi madre, mis sobrinos, es algo muy lindo, soy muy familiera y disfruto mucho de todo esto. Me encanta el contacto con la naturaleza, sigo acampando todos los años en verano, espero año a año el campamento en Santa Teresa, me gusta andar en bicicleta y viajar. Son mis hobbies, naturaleza y movimiento” finalizó diciendo.