El proyecto Brotamonte apunta a la restauración de una zona del bosque nativo del Río Yi, en este caso el lugar de intervención es San Borjas, donde se han llevado adelante acciones de investigación participativa de flora, fauna y conservación in situ, restaurando el área de intervención y generando acciones de reforestación con especies nativas típicas de la zona.
Además, también realiza control de especies exóticas, intentando evitar el rebrote de especies invasoras que se encuentren en el bosque con acciones de conservación construyendo un invernáculo e instalando un vivero de plantas nativas características de la zona para ser reforestadas en el área afectada por el proyecto, como en otros puntos del bosque que, previo estudio, se designe.
“Brotamonte es un proyecto vigente desde abril de 2022, proyecto de restauración de bosques en el río Yí, reforestación, investigación y participación ciudadana. En nuestro planeta los ecosistemas han sufrido los efectos de estresores antropogénicos que nos están llevando a la llamada sexta extinción masiva. En respuesta a esto las Naciones Unidas han declarado al 2020-2030 como la década de la restauración de los ecosistemas, apuntando a la mitigación de la degradación de los ecosistemas y la pérdida de biodiversidad” indicaron desde la organización.
“En el contexto nacional como signatario del convenio de diversidad biológica Uruguay se ha comprometido a conservar y restaurar los ecosistemas que proporcionan servicios esenciales, en la ciudad de Durazno el bosque ribereño del río Yí es un ecosistema que ha estado en estrecho contacto con la comunidad local y a la vez, ha sufrido una fuerte degradación ecológica causada por la extracción de arena, el aumento de la degradación de los suelos por malas practicas atrícolas, la tala indiscriminada de árboles nativos y la presencia de espeies exóticas invasoras. Esta situación dificulta la conservación ya que alejan al bosque de su dinámica natural e impiden su regeneración causando efectos a nivel ecológico, social y económico” agregaron.
“Este proyecto propone acciones para la conservación insitu y exsitu del bosque ribereño con un fuerte componente de participación ciudadana en las etapas de planificación, ejecución y difusión, evaluación de todas las actividades. Brotamonte propone actividades con distintos enfoques y busca generar interacciones con colectivos diversos en cuanto a generaciones, género, formación, ocupación y procedencia” dijeron.
“Dichas actividades se organizan en tres ejes, la investigación, experiencia y participación ciudadana en el área que permiten caracerizar el bosque ribereño a través de muestreo de flora, fauna y vabiables ambientales. El otro eje es la conservación, jornadas de reforestación y de control de especies exóticas y acciones integradas de conservación insitu y exsitu del bosque con participación de la comunidad. El tercer eje es la formación de talleres de capacitación, sensibilización y educación ambiental” agregaron.
“Los resultados del proyecto están permitiendo contar con la caracterización de la flora y la fauna presente en San Borja del Yí realizada en forma participativa, un plan de restauración del área que implica la reforestación en especies nativas y el control de especies invasoras, la nstalación de un vivero de plantas nativas en la Escuela Agraria que será cogestionado con la dirección, los docentes y los estudianes de dicha institución y que tendrá doble propósito, educativo y fuente de plantas para reforestacion de espacios públicos” dijo.
“Otra área es el fortalecimeinto de la red de personas, organizaciones de la sociedad civil, instituciones que trabajen para la conservación del patrimonio natural del departamento. Brotamonte es coordinado por las docentes Sofía Cortizas, María Laura Umpiérrez y Natalia De Almeida, docentes de la carrera de Ingenieria Agroambiental e investigadoras del grupo de Agroecología, Sustentabilidad y Medio Ambiente de la Universidad Tecnológica UTEC.